Antes, los padres eran muy rectos, quizás demasiado y no dejaban a los hijos casi ni comportarse como tales. Y ahora mismo somos todo lo contrario, no digas nunca al niño que no se vaya a traumatizar y haya que llevarlo al psicólogo. Con todos los respetos, los que estamos de psicólogo somos los "adultos".
Esta mañana cuando iba a trabajar me he parado en un semáforo rojo para los peatones. A mi lado se ha parado una señora con un niño que no llegaría a los 15 años y el niño ha querido cruzarse. La madre le ha dicho que estaba el semáforo para esperar y el niño le ha dicho con gritos y muy malos modos "AQUÍ HAY UN PASO DE PEATONES PINTADO Y LA PRIORIDAD LA TENGO YO".
La madre ha callado y han intentado cruzar. Y digo intentado porque han estado a punto de ser atropellados por un coche que iba bien.
Para mi todas estas cosas son algo incomprensibles. No entiendo porque si a ti te han dado una buena educación donde te han hecho ver lo que está bien y lo que está mal, te han enseñado que no siempre vas a llevar razón y que no eres el ombligo del mundo, seas incapaz de educar a tus hijos.

A los niños no hace falta ni gritarles ni pegarles para que entiendan y aprendan a ser personas, pero si se les da toda la libertad del mundo no les hacemos ningún bien, solo les estamos empujando a vivir en un mundo de futuros frustrados.
Además, dejar que hagan lo que quieran no te hace mejor padre.
Pongamos todos de nuestra parte, que tampoco es tan difícil.